La silla de pensar. ¿Es la solución al problema o es perjudicial?
La silla de pensar es algo que se suele utilizar para que los niños se den cuenta de lo que han hecho. Pero, ¿es efectivo o perjudicial para los hijos?
Nosotros como adultos, cuando un día estamos preocupados por algo, no estamos concentrados, pensamos si hoy no me hubiera levantado de la cama habría sido mejor, no damos pie con bola, estamos desconcentrados en el trabajo, en casa, con nuestra familia e incluso a veces no nos apetece ni que nos hablen.
En estos días, lo emocional nos atrapa, no deja que nos concentremos, que nos centremos en las tareas que tenemos que hacer ese día, nos sentimos bloqueados y muy pocas cosas nos salen bien.
Pues si a nosotros como adultos nos sucede esto, imaginemos a los niños, esas personitas, que aún no han aprendido habilidades para su día a día, cuando mamá, papá, los monitores del comedor o las profesoras de la escuela infantil les dicen que vayan a la silla de pensar y que piensen en aquello que han hecho mal…
En sus pocos años de vida, ¿creéis que están preparados para sacar una conclusión o mejor aún una solución del problema que ellos mismos han creado?
Y si se les obliga a pensar en el problema, y en lo que han hecho, ¿creéis que van a encontrar la solución o acabarán poniéndose nerviosos de pensar sin parar en lo que ha pasado y posiblemente a ofuscarse, sentirse bloqueados e incluso a frustrarse o ponerse más nerviosos y comportarse peor?
Por favor no enviéis más a los niños a la silla de pensar, o a ese rincón, esa zona del aula de la escuela o incluso esa zona dentro de casa, los niños la tendrán asociada a algo negativo con lo que nunca querrán ir allí, llegando incluso a no entender si cuando están ahí es porque tienen que pasar por esa zona, o es porque tienen que pensar, o porque están castigados… incluso podemos llegar a crearles una fobia, como por ejemplo no querer ir solos por el pasillo, o no ir a su habitación y no querer dormir ahí porque han asociado ese lugar de casa con un mal momento, el del rincón o silla de pensar.
En el próximo post, os explicaré la forma adecuada de utilizar la silla de pensar o en términos de psicología, cómo hacer tiempo fuera.